20 ene 2015

Trazas

       Se me indican camino y sendero. La fobia a mostrar discomfort. Una proeza. Engañar el alma, luego sosegarla.
Soy social, soy causal y correspondiente. Sigo dicho camino. Me relaja. Así sucede cuando tiempo y ejes convergen. Puedo tomar otro vaso pues no hay piedad de mi para mi. Pareciera que me odio y lo demuestro a cada decisión que tomo.
La autocompasión es suficiente. Lastima instinto y asunto. Relega el tiempo, te detiene ¿Acaso se acaba?  Me corre entre los dedos como una verdad impurgable. Conozco huida y desemboque. Un delta en mi. En mi idea. Delta que se encarna bien desarrollado, del instinto entre individuos con deformaciones del aspecto social estándar.
Las vetas afloran en mi. Hay positivo y me quiebro en pedazos de consciencia. Como la figura tribulante. Amena al desdén del fenotipo. Un alma sacrílega y más vacía que el averno mismo en ausencia de satanás.

30 ago 2014

Juan Infierno

      Juan infierno no tiene cadenas porque carece de brazos y piernas para portarlas. No tiene estribos porque le falta el juicio que los forja y tampoco tiene una mujer porque necesita un órgano para satisfacerla, y para variar, carece de él. Infierno no anda por la duela o el adoquín, prefiere andar sobre el agua o simplemente levitar por los aires, contemplando a las infantas y deseando ser el primero.
      - ¡Como me gustaría tener boca, dientes y un sistema digestivo! Así podría comerlas como leguminosas. - Piensa Juan - Pues le gustan sus galgos pero insípidos pechos, podría, como waffles, escanciar la miel sobre ellos y entonces, ¿Por qué no?  Comerlos.
         

1 jun 2014

Meine erste Crush der Uni.

       Sobre mi primer crush de Universidad puedo decir mucho; que si es rubia, que si tiene ojos de color, que si es alta o tiene unos hermosos senos , pero no me centraré en ello, empero, me atreveré fiel a mi costumbre describirle de la manera más elocuente que me pueda permitir tomando siempre como premisa el impulso sutil de la naturaleza y sus argucias emocionales, pero sobre todo, la razón.

       La conocí en los cursos de inducción y no bastó mucho tiempo para fijar mi atención en ella, al igual que hicieron mis futuros colegas desde el momento en que se presentó en el aula.
Me cuesta un poco pensar en como, y debido a mi (otrora¿?) carencia casi patológica de calor femenino, no me costó más que unos días el elevar las cosas, y de manera consecuente elevarla.
 
       No es un ser necesariamente especial, nada ofrece distinto a otra mujer en cuanto a términos biológicos y evolutivos, en cuanto a su cuerpo, posee éste el mismo par de ojos, piernas, brazos, senos y glúteos que poseería cualquiera, la misma cavidad húmeda que bajo la estimulación adecuada eyecta vida a los nueve meses, cabello, uñas de colores diversos merced de un accidente sutil y delicioso que ha moldeado estos deíficas formas hasta rozar el ideal. 

    Ocasionalmente se le puede ver consumiendo alcohol o tabaco, sólo ocasionalmente, a manera de distracción y no como (mayormente sucede entre consumidores asiduos) paliativo.
Ella, pues, tiene en tanto a mujer un accidente sutil que necesariamente le ha otorgado cotización y respeto de una forma meramente instintiva por parte del género opuesto, un status que condecora a aquellos cuya silueta es preciada según lo ut supra mencionado.

       Su lozanía me remite a un individuo sin grandes curvas en su vida, sin grandes contrastes entre experiencias gratificantes y experiencias de carácter adverso, no existen deformidades aparentes en ella en lo tocante a sustancia y accidente; además por si fuere poco, su fenotipo no le traiciona y al investirle de una epidermis más clara que el imaginario común, le otorga el punto de valor de la distinción.

       Decíamos pues, de sus curvas no mórbidas, que al carecer de ellas, esta rubia no se ha visto en la necesidad de liberar una faceta de ella misma bajo los límites de su consciencia y raciocinio al ser violados por una situación anómala y adversa, o una de plenitud y ensimismamiento egoístas. Jamás se le ve alterada o tensa, nerviosa o a la expectativa de algo que le torne inestable. Esta característica casi sin importancia actúa , empero, como imagen de rebote de su momento sociobiológico a la cual, sólo hace falta determinar el índice de refracción (Desviación SB) para entregar un informe totalmente fidedigno. Le encontramos, pues, libre de toda gran perturbación al menos en apariencia, lo que la hace ser una persona de trato sencillo y mente accesible, moldeada también por el ser social que a manera de facultad de ingeniería la ha anegado del ser varonil, de sus conductas y sus imprimaciones, llevándola así a adoptar conductas con marcada influencia masculina, sin decaer ni divagar en ningún momento su camino elemental biológico.

       Decíamos pues del trato sencillo, y de la mente accesible que vienen determinadas por el denominado núcleo estándar del pensamiento, que sirve como plantilla básica de relación social si se ha estado expuesto a la sociedad bajo condiciones adecuadas de tiempo y modo, y que se presenta cada vez más natural en el ser humano. El núcleo puede tomar diversos valores o formas dependiendo casi directamente del superyo, del núcleo social más íntimo quien a diferencia del ser natural que es caótico, sigue ciertas pautas definitivas, tiende a categorizarse como base y que, en cierta forma lo es, ya que sin racionalizar previamente dicho núcleo se cristaliza y replica en aspectos más globales de la sociedad, provocando reacciones directas conscientes, directas inconscientes, e indirectas y muy complejas según la idea que se asignó en la mente.

  

Har kommet

30 may 2014

Primordial



       Es sutil pero me imprimo en rasgos de una calle abandonada por perjuicios encadenados bajo el haz de una relacion bien terminada, ¿Terminada? ¡Pero será en la boca de esa puta!
La que no vale un carajo, la que quizás vale aun menos que quien pensé que valia, quien pense que añoraba por ser especial, por ser diferente aunque su única diferencia fue la de ser igual, la de ser la misma mierda, pero eso tiene une explicación sociobiológica que no tiene caso saciar, sino golpes de realidad clavados en mi.

       No puedo evitarlos, veo verde en el trayecto y como todo se abstruye, como mi mente me cala al evocar esos recuerdos que ahora desfogo como una micción suprema, porque eso son, son orín, son lastima y decadencia , no importa que este permeado ahora, si acaso se permea se permea lo ideal, y le tenia tanto sentimiento a esta canción, pensar que la amaba y la respetaba, es un gran tema pero sinceramente no puedo reducirme más, a estas alturas se vuelve insportable.
      El progresivo es legendario, es trascendental a mis prejuicios, ya lo siento, me dejo llevar  y siento el piano, el cierre es magistral, Tenemos que contextualizar de que época es la canción y pensar lo adelantada que estuvo a su tiempo. Es una obra de arte.
Si la analizas conforme a su tiempo fue una apuesta muy seria. Un bajo muy acertado, pulcrísimo.

Tiendo al bajo a partir de la escición, no puedo creerlo, pareciera que lo mio es patológico, siempre se va algo, y el que lo bloquee no va a detenerlo.

23 may 2014

De la responsabilidad y su sutileza.

Jean: Cuanto me duele el verla, ¡Oh tragedia!; vestida de harapos turbios y elegantes, compartiendo sábanas con alguien más, frotando sus cabritillos y rufianes pechos con su hombría y lascivia, explorando nuevos horizontes. Llenándose el orgullo y la realización hasta el tope. Siendo niña y mujer, dependiente y dominatriz. Ama y esclava, como otrora le acaeció a mi lado.

ECF: No hay pensamiento más inutil que el que encamina al pasado y sus ardides violentos y febriles. La consciencia y su antinatural y pragmática naturaleza nos han mostrado que el único remedio efectivo contra la miseria y el oprobio es la satisfacción desbocada de las responsabilidades autodelegadas con el fin único de alcanzar la realización integral. No una tercia de cavidades húmedas.

J:Esas tres cavidades te las cambio por una y trina, la humanidad que actualmente no es más humana que un par de glúteos o la divisa adecuada. Si bien no exagero ya como en aquellos momentos, aún a veces me despierta el sueño y su realidad efectiva, donde el instinto me corona el acento.

 ECF: Si bien todo es vanidad, y tiene una extensión y duración bajo el sol, es  una necedad suponer que el ocio puede acaso solucionar algo.
La creación deviene en existencia por mero sentido común, y es algo que le juega muy en contra  al perezoso. 
¡Crea y Existe!

Kaltes Schlag: Der Zweite Teil

Recordamos

       Y entonces recordamos que no somos más que eso, almas tan livianas que al primer soplo de viento resultan disparadas por los aires. Somos ataúdes inmensos donde guardamos nuestros propios anhelos, nuestras alegrías, nuestra inexistente identidad. Somos canas en un pajar, pájaros en la parvada.

       Nos contoneamos en el andar de nuestra miseria. Hemos exigido al mundo brazos abiertos, abiertos a los nuestros pero nosotros no tenemos. No poseemos nada. Seguimos vacíos, tan acompañados en nuestra abstrusa soledad, que el simple hecho de pensar ya nos parece una osadía, brotamos entre flores muertas y cizaña hacendosa, solo para morir enterrados en la misma tristeza plausible en la que nacimos. Somos hiperbóreos, somos, en fin, existimos a veces bajo el triste letargo de un vistazo de grandeza, y luego;  abrimos los ojos y advertimos que nuestra vida vale nada sino unos mililitros de tinte para las uñas, o un par de zapatos nuevos. 

      Nos extinguimos en ese sopor anhelante que lega el pobre a su  hijo y que el rico no conoce, nos desintegramos en materia de soledad errante, canjeamos nuestros recuerdos y añoranzas por mierda envuelta en tira para regalo. Somos los mismos que hace cinco años lloraban por algún ardid emocional inconcluso, solo que ahora perdemos la poca conciencia que nos quedaba en el mismo nombre.

It's never simple never easy. 

10 may 2014

Hoy vi un porno japonés.

       Justo acabo de ver un porno japonés, y no me arrepiento. Son siempre bienvenidos los gemidos, las caricias y ese aire juvenil y espontáneo que aporta naturalmente el amigo nipón y su contraste con el imperio occidental. No fue un video fácil, varias ocasiones tuve que contenerme para no sucumbir ante el encanto de aquella grácil joven que contoneaba ágilmente sus caderas cuando se le daba la estacada apropiada,  dejando boquiabiertas a la mismísimas cataratas Victoria al mostrarnos su esencia sutil y flotante, así como por la magia y astucia de un ciudadano que si bien no mostraba los dotes extraordinarios del porno americano, poseía el talento y disciplina de un verdadero samurái contemporáneo quien desde que ingresó a escena hizo advertir su dominio total sobre la pantalla y su autoridad sobre las contracciones involuntarias de dicha señorita nipona, ora tocando, ora exhalando sobre aquel ápice sutil del placer efímero de cualquier alma femenina.

        Me agrada con fines prácticos y puros el devenir del video, observar ese cuerpo sutil magreado por el estupor pasajero pero violento de la osadía del ser humano por perpetuar su camino, como si no existiese un fuego sepulcral e imparcial que cremara todo, incluso eso que ella y él sienten. Me gusta ver a la mujer retorcerse y plañir por más de esos 13 centímetros que le son todo el mundo dado, el que existe y el que no. Pone toda su técnica en otorgar placer, al igual que su compañero; pone su técnica que es incluso superior a la promedio, pero de una manera discreta; es decir, no alardea en demasía sobre su celestial talento y se limita a hacer mostrando un pragmatismo celebérrimo e indemne, digno del más puro sincretismo social del país del sol naciente.

        No importa mas que cumplir, que entregar resultados y ser eficientes, incluso en el sexo. Y podemos medir dicha eficiencia y compararla con el plano sicosocial del ser humano, en tanto que japonés y encontrar la esencia de esa voluntad de identidad ideológica que es inherente a todos, y que como una simple receta de cocina o un manual de instrucciones para armar una mesa, permite anticipar con cierto grado de confiabilidad la acción posterior. 

        Sea lo que fuere, por inducción simple podemos categorizar estas plantillas y a través del concepto de ser social comprender cómo una simple felación de magistral ejecución, puede darnos mucho a entender, como que ella se entrega, como que él cumple su función fustigadora y con creces, y como que estoy tan excitado que la moral y indecencia se funden en un abrazo séptico que me desvaría el cogito en coito. Y pienso en la japonesita que disfruta tierna pero tenaz el placer que en ese momento le priva de toda privación, porque está en su esencia de la misma forma que la disciplina y un arte moral de perfeccionamiento que durante cientos de años moldeó hasta su ideal el fenotipo del japonés y como éste, que ha sido tachado de cuadrado, inflexible y estricto ha dado pie a una de las sociedades más fuertes de las últimas décadas, una nación que parece ha vuelto a surgir en un sol que ha nacido más fuerte y técnico que nunca, cuyo control de calidad y responsabilidad de, precisamente, hacer y hacer de manera sublime parecen haber encontrado una nueva cima desde la aparición de aquellas luminarias que le obliteraron el cuerpo, sólo para revestir aún más de honor y coraje su ser.

       Mi mano y mi tiempo nunca han congeniado mucho y durante los minutos que dediqué a dicho video no fue la excepción, y es que no hay para más. Comencé a imprimar rapidamente, a revolucionar el motor biológico y evolutivo que permite asegurar la progenie y no tuve forma de contenerme para lograr observar el desenlace, que sinceramente, puedo suponer muy bien. 
         

18 abr 2014

¿Qué hay con aquello que es parte de la realidad pero no es real?

       El plástico y aluminio entonces ceden, y al ceder me regalan su fruto blanquecino y abotonado. Doy dos pasos hacia atrás entonces mientras contemplo de fijo dicho botón, viro mi diestra y consigo un vaso con agua que con presteza bebo, no sin antes derribar casi la mitad de una preciosa colección de tazas que otrora me regaló mi Abu junto a una bendición antes de partir a esa maldita guerra, a arrebatarle a esos guachitos pálidos aquello que siempre fue nuestro.
       No me espera un día particular, no haré mucho hoy. Esos soretes me han arrebatado mi humanidad y mi ego, ahora sólo floto en la parsimonia de una vida sobre la que ya no tengo control.
Avanzo con más antipatía que calma a través del corredor y me encuentro una puerta, de la cual miro su cerrojo mientras palpo mis bolsillos buscando el medio para permearla.
      ¡Esto es una puta mierda! He dejado las llaves en el bolsillo equivocado.  Giro el tronco 90º hacia la izquierda con un esfuerzo sobrehumano y 'Voilà, c'est la clé'. Vocifero mientras recuerdo un poco del francés que llevé en el cole. La hazaña está hecha.
Ya está del otro lado recibiéndome un cuerpo desnudo, al borde de lo famélico así como algún otro acompañante improvisado. He de ser hoy el zángano de esa minita, para variar, también pálida.

¿Qué hay ... ?

Vamos a hacer ciencia, Jesse.

       Discurro de manera tranquila en München 252 con Sebas, mientras él posee el tan solicitado cable y sintoniza algunas canciones de géneros variados. Bebo un vaso de agua del grifo en un recipiente desechable y fumo algunos Marlboro rojos. 
       Pienso en ella y en la plenitud de su figura, tal vez no tan perfecta como cuando la poseí aquella vez primera, tal vez no tan deseable como otrora, esa figura que si bien ya no era aquella que le había otorgado el mote de “Viejota” seguía despertando pasiones ínfimas y carnales, pero siempre sinceras entre cualquier galán de ocasión que reparase su vista en ella. Esperaba con ansia que el tiempo corriera otros veinticinco o treinta minutos, así podría dirigirme a la calle Danzig a comprar algo de Meth y sentirme ese titán que siempre promulgo ser por un rato. Aunque fuese una idea inducida de la manera más miserable.


       Ahora tengo yo el cable y suena algo de System Of a Down, pero no es lo único que tengo. Este sopor intenso y apabullante mordía mi espalda de nuevo. Pensaba en ese vacío solemne que de materializarse traería el gris de vuelta a mi vida, a reserva de que alguna heroína enmascarada acudiera a mi rescate. Estela.
Me espeté, tomé mi cartera y emprendí camino hacia la Danzig , el frío era notable y por el furor del momento me dejé llevar, caminaba por la Hannover mientras mi mente era invadida por un solo pensamiento. Intoxicarme.   

       Crucé la pedregosa calle Dresden y mis torpes pasos tropezaban una y otra vez con las piedras que decoraban el camino, oscuro, iluminado acaso por un par de lumbreras de un color ámbar agonizante lo cual no contribuía mucho a mi deteriorada vista. Pensaba en Estela y en su reflejo trastocado por la sustancia que sin entrar aún a mi sistema ya causaba estragos en él.
Miré un par de veces a los lados mientras cruzaba la Frankfurt A.M y pude atisbar un par de perros famélicos ladrándome a la distancia, sin el valor suficiente para darme alcance y hacer lo que fuese que desearan. Ese frío interno volvió de nuevo a mi espina y me poseyó por las siguientes dos cuadras hacia aquel deleznable motel que tenía por destino, donde minutos después me entrevisté con una prostituta. 

-          Buenas noches – Rompí el silencio de una manera excesivamente cortés dada la situación y mi interlocutor tan improvisado. --
-          Buenas noches – Respondió un individuo de aspecto femenino, con senos grandísimos pero voz de varón, quien me superaba en estatura por unas cuantas pulgadas.
-          Quisiera saber dónde puedo conseguir yerba, o algo de cristal.
-          Pues cristal se pue'e conseguir aquí, na’más que 'orita no'stán las muchachas.
-          ¿Y yerba? – Complementé con una inquietud rayana en la desesperación.
-          Pós’ yo ni le he dado nunca a la yerba, pero el cristal aquí lo consigues, no sabría decirte si también la yerba aquí la encuentres.
-          Pues unos amigos …
-          ¿El cristal de a cuánto lo necesitas? – Interrumpió, y se llevó las manos a la bolsa dándome esperanzas.
-          ¿De cuánto tienes? -- Reconvine nervioso, sintiéndome observado por algún policía incógnito, o algún conocido hipotético que discurriesen por el lugar.
-          Pos’ yo no tengo, pero pos' hay de a doscientos, de a quinientos y de a mil. Depende de cómo quieres que te pegue 'sa madre po’que está cabrona.
-          Pues de doscientos, es lo más que traigo.
-          No, pos’ date la vuelta más tarde y capaz que t'encuentras a las mushchashchas.
          -         Gracias – Complementé, me di la vuelta y volví a casa, entonces escribí las siguientes líneas:

"El punto de ser parte de una relación es el completar un todo, que aunque quimérico, es un todo y parece real aunque sea en el sublime y tambaleante encanto de lo emocional, que no es más que una argucia evolutiva."

15 feb 2014

Millonarios de Izquierda.



      Entonces penetro. Siento sus labios tersos y asalmonados rodeando mi hombría y me deleito en contemplar sus rollizos senos golpeando una y otra vez, con un compás musical su pecho. Su respiración entrecortada se trocaba por gemidos más o menos esporádicos llenos de un mítico halo de lujuria de Kindergarten. Sus besos me parecían más vívidos que nunca, dotados de morfina pura, de una implosión de energía digna de los cristales más finos e inmaculados. Corre Agosto del 2013, así como yo tres patéticos minutos después.
     La abrazo, luego la beso. Hiede a sexo, uno distinto, uno de primer nivel, con una mujer de primer nivel.
Antonella y yo discurrimos por alrededor de cinco horas hasta que mi Optimus L5 da las 7 de la mañana y mi hora de abordar el autobús rumbo al diplomado de alemán.
      Aún irradiado por aquél magnífico halo de inmortalidad, me levanto con presteza de lado de Anto, quien no tardó mucho en caer dormida, tomo mis cuadernos y me dirijo a esperar el bus en la estación Centauro sin haber tomado siquiera la usual taza de café matutina. 
      Una vez abordo mi transporte; el cansancio provocado en la anterior jornada y una pesadez infrahumana, aunados al hecho de que el autobús se encontraba lleno hasta el tope comienzan a hacer mella en mi y finalmente a la altura de la estación Sicomoro mis ojos se cierran y mis piernas flaquean, resultando en un fortísimo golpe de cabeza y muslos ante la risa de las decenas de personas que abarrotan el transporte colectivo; tomo mis cosas y el ápice de dignidad que me restan y decido volver a casa y saltar por ese día la escuela.
Al regresar encuentro a Anto en la misma posición que la dejé, la contemplo un momento, su cabello largo, su sumisión total en la cama. La furia con la que la había poseído la noche anterior y demás nimiedades que no tiene sentido destacar. 
 
      La sangre de mi cuerpo se acomoda rápidamente en mi falo y una necesidad imperiosa de repetir lo de hacía unas horas me cercena, pero es mejor detenerse. Frank podría bajar en cualquier momento y encontrarnos, y aunque por más que sé que no diría ni haría nada es mejor simplemente evitar la situación y limitarme a recostarme junto a ella y besarla. 
      Ahora que ya estoy sobrio y un poco más lúcido que en la velada anterior puedo notar un desagradable hedor a Red Label y Absolut, que juntos habían hecho las veces de cupido, como catalizador sombrío pero inalterable para aquellas almas en búsqueda de alguien con quien compartir sus miserias apiladas y erosionadas por años de inexistencia. Me aparto aún con una erección y me dirijo a mitigarme al baño. Duermo entonces tres horas en el sofá principal hasta que Anto despierta y de la manera más cordial prepara algo de Omelette du fromage que acompaña con baguettes que tienen ya dos o tres semanas en la alacena.
     No me puedo quejar, el desayuno es espléndido como la noche que me regaló.
 
     Conversamos por casi una hora, repasando nuestras vidas, todo lo que teníamos en común y como ésto había influído en la gestación de la noche de ayer y estos momentos que ahora compatimos hasta que finalmente llega la hora, Anto se retira, vuelve a su casa y yo a mi castillo de cristal.
Me despido de ella cordialmente, con una reverencia antinatural y mezquina y simplemente le deseo un buen día.
    Tomo entonces mi L5, llamo a mi novia Courtney y le reitero cuanto la amo y cuán agradecido estoy con Dios por haberla puesto a mi lado. 




No remorse.